No hay juncionarios abusones en Helicóptero...

Excalibur por José Manuel Toscana

 "-Insista, ya deberá estar aquí­ hace mucho tiempo" ordenaba -impaciente- el caballero de aires  chaplinescos, por el bigotito, o hitlerianos, también por el bigotón, a la encargada del establecimiento quién, ni tarda ni perezosa, comunicaba el malestar de "la señora" y sus acompañantes, a los indolentes escuchas de la torre de control aéreo instalada en las orillas de Pachuca.


A las dos y media de la tarde del sabadito siete de febrero, por fin, llegó el enorme helicóptero, ese pintado con los colores patrios, para llevar hasta su cantón en la capital del país, a la escribidora Guadalupe Loaeza , su hermanita y su maridón, desde el balneario de mis sueños el Royal Spa de Zimapán, donde por la liberal cortesía del gobierno del estado de Hidalgo, pasaron dos noches y dos días,  cuidadosamente atendidos como saben hacerlo aquellos profesionales: buena comida, excelentes servicios en el Spa: habitaciones confortables, atención delicada, experta,  de todo el personal y lo mejor: absolutamente de gorra! pues no faltaba más: Hidalgo paga.

Esta camarada, perredista contumaz, adoradora del memo-babas-cárdenas y del pejelagarto de moda, merece  las delicadas reverencias  del gobierno de Hidalgo, de origen priísta, partido  al que la periodista aborrece  de todo corazón, como  proclama cuantas veces tiene oportunidad.


Estaban ahí­, invitadas también por el  gobierno estatal, Xóchil Gálvez y su contlapache -una dama de facha atroz- perteneciente al gabinete de Fox,  además  Aurora Berdejo, autora de la columna Frentes Polí­ticos, ésta por su cuenta y riesgo  y otras celebridades, que no fueron distinguidas con la llevada y traí­da en el helicóptero del gobierno estatal, equipo que, se nos dice, nada más debe utilizar nuestro  Ángel Manuel, en  casos extremos, pues el costo de mover semejantes pájaros, es elevadísimo, sumado a, cuando menos,  45 mil del Águila que costó el hospedaje y masajes de las cursis damiselas, quienes se la pasaron hablando en francés, no fuera el diablo y los nacos otomí­es que las atendí­an les cayeran criticando a sus gentiles anfitriones.


    Por cierto, las damas en cuestión, son güeras de botella, descuidadas, fodonguillas, pues abajo de las mechas a medio teñir, asomaban las canas y el color del pelo original, como tirándole al gris de  jumento mezquitalero ¡Me lleva la tristeza!


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    Tres son los fundamentos filosóficos que mueven al mundo, a saber: "Las cosas duran hasta que se acaban. Una cosa es una cosa y otra cosa es otra cosa.  Y hay cosas que ni qué, ni qué"


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    Tengo la seguridad de que nuestro Ángel Manuel -Gloria Trevi tiene su Ángel Gabriel- ni enterado está de lo que hacen sus achichincles mientras él  se la anda partiendo  en la convención hacendaria celebrada en Querétaro, y  por todo lugar donde es necesaria  su sapiencia, austeridad republicana, en pos de la mejor vida para los paisanos, el cobro-reparto-justo  de los impuestos y, sobre todo, la transparencia en los gastos oficiales, para dar buen ejemplo y recuperar la confianza de los ciudadanos muertos de hambre, quienes  con su voto ciego,  pueden  hacer el milagro de que vuelen los helicópteros oficiales en honor de los vendeplumnas ¡Aleluya!


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    Ha de ser cosa del comisariato ejidal de Zimapán, que le urge seguir enchufado a la teta presupuestal y no encuentra mejor manera que, a tiro por viaje, abusar del helicóptero oficial y traer montones de invitados, con gastos cubiertos mediante un "baucher" abierto,  del gobierno,  el que se va pagando  entre quince dí­as y cuatro meses, seguramente mientras junta la morralla para liquidar esas bagatelas.
    Más seriedad, señor  comisario  ejidal o los Q.R.R. ¿Qué no ve que está quemando a nuestro futuro preciso nacional?


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    Desde luego en el gobierno del estado de Hidalgo, me consta, no hay juncionarios abusones y,  mucho menos, de los bienes depositados en sus recias manos de ejecutivos fregones, jorocones, hombres ellos, honrados, honestos, a carta tapada.


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    Eso de andar echando palomazos para quedar bien con los cuadernos, con  los helicópteros, carros oficiales, casas de placer y otras fruslerías, son cosa de la servidumbre, ya saben ustedes, cómo es esa ralea de ignorantes que apenas divisan al burro ya se les antoja viaje volador.  Ha ¡ alabado!


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    "Escape-C" es una revista nueva dedicada al fomento del turismo en Hidalgo, proclamada ser "tu ruta a los mejores lugares" y logran una edición extraordinaria, tal vez la mejor que se ha editado por estos confines.
    Los valientes, por el costo y trabajo inmensos que se requiere, que hacen este portento, son merecedores del éxito y una prolongada permanencia en el mercado turístico interesado por  Hidalgo y sus mil tesoros dignos de ser  visitados por los nativos y fuereños conocedores en los bienes nacionales tan diversos, interesantes, bellísimos y, muchos, en grave peligro de  ser destruidos, como se comprueba donde se ponga la mirada.
    Ha¡ felicidades para Luis Gerardo  Palos y  su espléndida flota de compañeros en esta aventura!


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    El chofer del helicóptero estatal, seguramente andaba  en las chelas  sabatinas cuando lo buscaron y, de volada lo sacaron para  chambiar, sin  darle tiempo a embrocarse el uniforme;  se presentó en mangas de camisa  para fletear  a los invitados oficiales; total,  no hay fijón, al hermoso, patriótico grito  bucanero ¡A la gorra ni quién le corra!


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   Lupita Loaeza, era la mujer de turno del periodista  Granados Chapa, cuando este amigazo intimo de Manuel Sánchez Vite  -se adoraban-  le dio por sacrificarse en Hidalgo, con el aval del perrede -pero los paisanos lo ignoraron les digo-


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    Me tiene anonadado, el lanzamiento de las sondas espaciales destinadas a Marte. Esos sí son milagros y no cuentos juandieguinos.
    A lo que no le veo caso, son las fotografías marcianas  transmitidas.  Pudieron ahorrase el viaje y una lana, tomando mejores incluso más desérticos paisajes en el Valle del Mezquital y otros lugares paradisí­acos, como la Mixteca poblana, esa que protege Melquis Morflo, desde los helicópteros oficiales con los que cuidan a  sus rebaños los maravillosos hombres cuyos nombres, si los menciono, me harí­an la vida  de cuadritos.
Que sea menos ¡mamón!


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    La orden-invitación, llegó a los que debí­an presentarse por mil diversos conductos, casi todos entresacados de las juerzas policí­acas, delegados de comisiones, oficinas y otros sitios de poder estatal subordinado al ejecutivo formal o  mandamás  supremo.
    La hora: siete y media  de la mañana, en  la central de abastos de Actopan, para desayunar con el tlatoanito mayor de Hidalgo, para celebrar a su lado, el dí­a de su santo.
   Miles de burócratas de los cuatro puntos cardinales  de la entidad miserable, arribaron para refinarse parados, un tamalin y un chesco, servidos a rin pelón, sin plato de por medio, esperaron a que los consentidos llegaran y los saludaran a eso de las nueve y media de la mañana, luego de darse un atracón en la casa  del patroncito con suspiraciones celestiales.
    Todo sigue igual, los rituales, usos y costumbres   de la robolución mexicana, marcan la vida nacional para mayor gloria de los ganones. Ah ¡ felicidades! A ver cuando nos vuelven a invitar ¡ jijos de la villada!


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    Repasando detalles de la Historia, mejor dicho: el folclor polaco mexicano, encuentro que al compa Alvarito Obregón, de los nueve tiros que le recetaron, sólo uno no era  mortal. ¡Suertudo!


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    Como el helicóptero del gobierno de Hidalgo, seguirá volando al balneario de Zimapán, entre otros,  llevando -trayendo a los cuatachos consentidos, les recomiendo a los pilotos  aterricen en la parte poniente del terreno, así­ levantarán menos polvo en consideración de los simples mortales que ahí­ pernoctan. ¡Gracias!


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    "-Donde hay un cabrón, hay un pendejo; yo prefiero ser de los primeros y,  ¿usted compadrito?"  indagaba Álvaro Obregón


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  Que bonitos eran aquellos ciento y pico de años del  priísmo-porfiriano  cuando los usos y costumbres relacionadas con  la prensa aplicaban  el: ¡Cállense gallos pelones, ya les van a echar su maíz!  O la otra que me hace tanta  ilusión: "Perro con gueso en el hocico, ni ladra ni muerde"  Â ¡ Ay que tiempos señor don Simón!
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Sugerencias, vuelos de reconocimiento,
pases para balnearios, maicito y guesitos
al A. postal 22, Xicotpec, 73080
José Manuel Toscana

C. Elec.  j1939t@prodigy.net.mx

 

 

 

 

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