!Bueno te hará¡ el que venga atrás,  dice un tan antiguo como certero proverbio, refiriéndose a que tus desmanes serán olvidados ante los estragos que harán los que van llegando en tu lugar, pues generalmente resultan más que malos: atroces.

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Este mensaje alentador nada tiene que ver con los cambios en el panorama tristón de la grillería estatal poblana que,  hoy, inicia sus actividades formalmente. ¿O, sí?

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¿Aquí comen Don Quijote Y Sancho Panza? Lo que se comía en la Época: pan con queso y vino, bellotas y avellanas, tocino, vaca y carnero, cebollas y ajos, gigote, salpicón, duelos y quebrantos El plato nacional era la olla. En la novela se han encontrado hasta 150 formas de preparar los alimentos.

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Notas: Gigote, es carne picada; Duelos y quebrantos, es una fritada hecha con huevos, sesos y sebo, En los tiempos de don Quijote, la intolerancia religiosa era común y, para distinguirse  de los judíos conversos, los antiguos cristianos comían tocino, repulsivo para los  practicantes de rituales judaicos.

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Nada más para que tengan una idea de cómo anda el ambiente de los medios impresos en México y, en particular, Hidalgo y Puebla, van algunos datos:

En Hidalgo, circulan 6 publicaciones --4 de ellas meras repeticiones  de las ediciones centrales--  Certificadas por la Secretaría de Gobernación, una de ellas, Ruta.

En el estado de Puebla, figuran 10, varias repasadas con  semblanzas locales; en la Ciudad de México, existen 257 publicaciones de todo tipo, muchísimas de ellas llegan a los cuatro confines del país levantándose con la publicidad y lectores abrumadoramente.

Las publicaciones sin certificar, son cientos y cientos que, muy lejos de ser una expresión de libertad, no pasan de ser  únicamente negocios como las revistas de muñecos, de vaqueros, policíacas, de ovnis y magia, espantos y leyendas infumables, deportivas, las cuales lejos de alumbrar, estancan a sus semianalfabetos seguidores.

¿Qué hacer  en Ruta, para no diluirnos  en este mar de papel impreso? Pues atender los asuntos locales y regionales con mayor cuidado, ampliar la base de lectores con noticias e información  --que no es lo mismo--  interesantes para los que ya están cautivados y los lectores potenciales, por ahora alejados, de todo lo que es prensa escrita.

Los jóvenes que llegan al mercado laboral, los estudiantes; los que abandonan el campo; los que sólo buscan la manera de salirse de un entorno que nada les ofrece; las amas de casa afligidas por la  familia embrollada en la sobre vivencia cada día más ardua;  los pequeños empresarios acorralados por una competencia inclemente  de la cual casi no pueden defenderse; los viejos que ven cómo se agotan sus días sin haber salido de la barranca y, en muchísimos casos, el hundimiento es total, son el reto a vencer y la increíble oportunidad de que Ruta, sea un fiel espejo de esa realidad que, como se le quiera contemplar, es la única que tenemos y con la cual hay que lidiar;  para los políticos una tribuna confiable  donde exponer sus  hechos, sus ideas, su voluntad por encima del interés partidario que ahoga, sistemáticamente, la vida nacional de una manera criminal, convirtiéndolos en  meras comparsas idiotas de los que tienen agandallados todos los partidos-empresa-personal, también un espacio en dónde sabrán  cómo son percibidos por sus electores, la mayoría de las veces de manera distinta, a lo que ellos se imaginan o les dicen sus ganapanes, ahogándose en el autoengaño.

 ¿Cómo? habrá que quemarse las pestañas, superar intereses personalísimos, buscar nuevas fuentes de ingresos que den libertad de acción y superar las censuras prevalecientes donde el que paga, manda, son, entre otras posibilidades, las salidas  a la crisis de los medios impresos en general en México, donde el descrédito de los periódicos, es una realidad inocultable. ¡Ojalá¡!

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Comenta,  en sus alocuciones matutinas florestales el emir Wences Angulo, acerca de las "tres posibilidades de belleza que tiene el cuerpo: la Fuerza, la Gracia y la Plenitud" y que sólo algunos cuerpos milagrosos logran reunir las tres, como su colega Walter Mercado y, él mismo. ¿Será?

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     En el fragor de la contienda por  llegar a los cargos de elección políticos, las damas que incursionan en estos entramados encuentran un ambiente hostil, casi nadie les reconoce méritos y capacidades propias para estar donde están y,  por  sus aspiraciones legítimas, seguir ascendiendo en la competidísima lidia.

     La experiencia resultante de las mujeres participantes en la política nacional, es frustrante para el público, pues esas señoras dejan muy maltrecha  su bandería no importa de cuál partido provengan.

     ¿Alguien  puede  identificarse o sentirse representado por --entre otras-- Beatriz Paredes, Elba Gordillo, Dolores Padierna, Dulce Sauri, la atropellante delegada de Tláhuac, en el D.F. la otra de Álvaro Obregón, en la misma estrujada ciudad, las momias Sarita Ornelas  y Guillermina Rico, la farsante Chayo Robles,  la trabalenguas Marta Según, la senadora tlascalteca trepadora del PRD --antes PRI--  la  negrita sandía de Quintana Roo, la otra tránsfuga partidista Ady Joaquín, del mismo estado caribeño donde pretende ser gobernadora  por puritito rencor, las diputadas de la serranía poblana que han dejado huella indeleble en el Congreso de la Unión, por su intensa vulgaridad e ineptitud supremas, como copias al carbón de esa cosa que le dicen La Chupitos, emblema vil, ahora estelar  de la televisión de la mano con otras que se ahogan en la inmundicia, que llenan los espacios más caros  de la cartelera para idiotizar a los mexicanos.

     Estas son algunas de las mujeres públicas que  desmeritan su aparición, y lo que dicen interpretar haciendo mucho más arduo el trabajo de las matronas que ofrecen traer aires  renovados, calidad, conocimiento, honradez y, por encima de todo, discreción,  a estas regiones hidalguenses y poblanas donde el engaño y la simulación, son moneda de cambio.

     Contra estas nefandas imágenes se enfrentan las mujeres en la vida nacional, mucho más duras que la contienda  con los varones.

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     Oralia Vega, tiene la palabra y, en su momento, la acción en esta esquina hidalguense, donde las decepciones políticas  son tradicionales desde que tenemos memoria.

     ¡Ojalá¡ y el cambio necesario esté en marcha, en sus manos y,  en la medida que le corresponde,  retomar  el  imparable envión que le dan  su familia, su entorno, su capacidad y, no lo dudo, su amor por Tulancingo. ¡Ojalá!

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     Por eso, en el caso de Hidalgo, el sendero de las damas políticas es cuesta arriba, casi nadie las toma en serio,  ellas perciben, padecen,  esa enorme distancia  entre el pueblo y los partidos.

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     La sede para la cercana Reunión de la Amistad serán las suntuosas instalaciones del hotel La Joya, en Tulancingo, al medio día el sábado nueve de abril.

     Los responsables  del esperado acontecimiento despliegan imaginación, gusto y experiencia para darle un giro al festejo con sorpresas y regalos que serán muy apreciados por la nutrida concurrencia. ¡O verán!

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     Marcelo Garibaldi, advierte desde su afamada central de penetración aplicada: "La política es un arte del carajo; hay que darle las nalgas al de arriba y picárselas  al de abajo"

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     Van unas letras felices de Jorge Suárez, boliviano maestro de la palabra, para suavizar el estrépito que nos aturde:

 

Y pues quiero algo tuyo, he de arrancarte un hueso,

tal el zorro que sigue los rastros de una huella,

por peldaños de pétalos yo bajaré a tu beso

y a tu cuerpo: manada tiernamente dormida

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Reflexiona  el  prelado Wences Angulo: "No me gusta ser egoísta. Me he pasado la vida pensando en mi familia; pero también necesito pensar en mí" 

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